Y todo quedó sumergido…
03. abril. 22

Hay varios hilos conductores que recorren la Biblia. Uno es la noción de «salvación». Ante Dios, somos seres perdidos. No nos gusta esta descripción porque creemos que podemos arreglárnoslas solos. Pero los titulares de los periódicos que demuestran que, desde nuestra ruptura con Dios, somos capaces de los peores crímenes. La Biblia relata que, en los primeros siglos de la historia de la humanidad, el mal se intensificó tanto en el mundo que Dios tuvo que tomar medidas drásticas con un terrible juicio: el diluvio.

Sin embargo, el Señor miraba a Noé con buenos ojos.

Génesis 6, 8

Enormes masas de agua anegaron el planeta y desapareció todo rastro de maldad e injusticia. Pero, antes de la llegada de este azote, Dios había lanzado una operación de rescate. Noé construyó un arca para salvar a los habitantes de la tierra y a los animales. Pero los hombres se rieron de Noé y su barco, que tardó muchos años en construirse. En el último momento, Dios mismo cerró la puerta del arca. En su amor, Dios llama a cada ser humano. Pero el que rechaza esta oferta de salvación se expone al juicio. Y tú, ¿aceptarás la invitación de Dios?

Texto de la semana: Mateo 24, 37-39 / Hebreos 11,7

Faltan diez céntimos

Hace poco, había una niña delante de mí en la panadería. Quería comprar un panecillo. Por...

  • 3. diciembre 2023

La razón de los sacrificios

A menudo, los seres humanos estamos dispuestos a hacer sacrificios para conseguir algo. Gastamos...

  • 17. julio 2022

José, el buen artesano

José, descendiente directo del rey David, era un buen carpintero. Estaba comprometido con María y...

  • 15. diciembre 2024

Hast du Fragen?

Über die Inhalte oder über eine persönliche Beziehung zu Gott? Nimm Kontakt mit uns auf. Deine Angaben werden absolut vertraulich behandelt.