Lo que podríamos considerar el cumpleaños de Jesús (la Navidad) se celebra hoy en casi todo el mundo. La mayoría de la gente se reúne en familia. El principal propósito de esta fiesta es recordarnos que Jesús no vino al mundo hace unos dos mil años, pero también que vendrá otra vez.
En este sentido, la Navidad es la fiesta más importante. Es fundamental recordar su próximo regreso, además de no olvidar a Jesús mismo. Todo gira en torno a él, porque celebramos su cumpleaños, y lo importante es una relación con él, pues para eso dio su vida en sacrificio.
Conclusión: sin Navidad no hay Semana Santa, ni Ascensión, ni Pentecostés… La cultura cristiana ha creado días festivos para que recordemos al Hijo de Dios regularmente. El mundo gira gracias a él.
Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre.
Hebreos 13,8
Un consejo: que Cristo sea el centro en tu celebración de estas fiestas con tu familia. Él no se quedó en el pesebre, ha resucitado y está vivo, y vendrá otra vez. ¿Estás deseando que vuelva?